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Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa

Lucas 19:5


JESÚS CONOCE TUS LUCHAS

“Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles». Marcos 6:48

En Marcos 6, Jesús envió a los discípulos a Betsaida, mientras él se fue a solas para orar. No fue un largo viaje en barco, pero perdieron el rumbo por una tormenta, y cuando Jesús los vio luchando contra el viento en el medio del mar, vino en su ayuda.

¿Has estado en una tormenta fuera de curso? No tenías ninguna intención de estar donde estás hoy en tu trabajo, tu matrimonio, tus finanzas. Has sido desviado de tu trayectoria por situaciones que no podías controlar, en este punto, has perdido la esperanza de llegar a tu destino original. Lo que deseas es volver a la seguridad.

Tal vez había grandes sueños para tu vida hace mucho tiempo. Ni siquiera estás preocupado por el progreso en este momento. Sólo estás preguntándote, «¿Podré sobrevivir?»

¿Qué hace Jesús cuando estás en un momento de desesperación? Marcos 6:48 dice, “cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar». Nota que Él no les dijo a los discípulos que se dirigieran hacia Él. Él sabía que no podían llegar a Él. Jesús se dirigió a ellos. Cuando estás en ese punto de desesperación, Jesús viene a tu encuentro.

Me encanta el hecho de que Jesús no dio ninguna de las instrucciones desde la orilla. Cuando estás en una tormenta, no necesitas consejos. ¡Es necesario un milagro! Necesitas que alguien aparezca, y esto es lo que hizo Jesús. Intervino en la tormenta de los discípulos.

Este es el Evangelio – Dios no está en la costa diciéndonos qué hacer. Él sale y se encuentra con nosotros en nuestro dolor, nuestro miedo, nuestra depresión, nuestra tormenta, y nuestro desaliento. Él viene a nosotros. ¡Qué Dios!

Puede que te sientas abandonado en este momento, pero no lo estás. La Biblia dice en Juan 14:18 “No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.” ¡Puedes contar con Él!

JESÚS VIENE A TU ENCUENTRO

LUCAS 19:1-10
Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí. Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso. Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador.
Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

1. Quien era Zaqueo?
Era jefe de los publicanos, y rico, Los publicanos en la sociedad eran lo peor de lo peor eran los que cobraban los impuestos para los romanos.
El cobrador de impuestos tenía tres características por las cuales era particularmente repugnante: 1) colaboraba con el enemigo que ocupaba Israel, 2) permanentemente estaba en contacto con los gentiles y 3) era muy corrupto.
Muchos lo insultaban y nadie le amaba, no era bienvenido en ningún lugar y menos en la iglesia.
¿Te sientes identificado en alguno de estos aspectos en medio de la sociedad o en medio de los círculos sociales en que te mueves diariamente?. No importa porque Jesús al igual que con Zaqueo, ha dirigido su mirada y sus pasos para encontrarse contigo hoy.

2. No conocía a Jesús pero estaba inquieto
El Espíritu Santo estaba actuando en Zaqueo, poniendo en él, el deseo de ver a Jesús, quizá terminó su trabajo, o quizá lo dejó para intentar ver a Jesús, aunque tenía sus limitaciones.
¿Sabes que no estás leyendo esto por casualidad?, El Espíritu Santo está poniendo su deseo en ti, para que sigas leyendo y para que sigas investigando en conocer a Jesús, porque hoy es necesario que le conozcas.

3. Zaqueo se esforzó para estar con Jesús.
Subió a un árbol sicómoro para verle; quería verlo aunque fueran segundos, saber como era ese hombre.
No busco excusas ni culpó a los altos que le impedían verle, se esforzó y luchó en contra de sus limitaciones. Subir a un árbol significo humillación por su condición de rico. No le importo humillarse. Quería verlo, aunque fuera unos segundos.
Ahora vendrá a ti, todo aquello que intentará impedir que conozcas a Jesús, y tendrás que decidir, hacer caso a todo ello poniendo alguna excusa para abandonar el deseo de conocer a Jesús, o esforzarte y luchar, aunque eso implique humillarte dándote a conocer delante de Dios que le necesitas.

4. Jesús lo conocía por nombre
Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo.
Jesús pudo pasar de largo pero se paro, miro hacia donde el estaba y LE LLAMO POR SU NOMBRE, pero nunca antes se habían visto.
Dios te conoce porque Él te ha creado, y hoy ÉL ha decidido venir frente a ti todo el tiempo que sea necesario, no se irá, porque ha puesto en tu vida, el deseo de que le conozcas, y está viendo tu lucha y tu decisión en este momento de conocerle o de seguir tu camino dándole la espalda.

5. Recibió de Jesús más de lo que podía esperar
Date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.
Nunca esperó que Jesús, el gran Rey se quedara mirándole, le llamara por su nombre y además quisiera ir a posar en su casa, el era indigno de una visita de esa categoría.
¿Dime, si una persona que tu aprecias mucho y que sabes que su visita te repostaría un gran beneficio, te dijera que es necesario que le acojas en tu casa, lo harías?, yo creo que todos lo haríamos aunque solo fuese por el beneficio.
Jesús, el Rey de reyes y Señor de señores, el creador y sustentador de este mundo, te dice que ya no quiere que sigas caminando solo, y Él te dice que es necesario que yo entre en tu casa hoy. ¿Que harás?.

6. La respuesta de Zaqueo
Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso.
A partir de ese momento, Zaqueo conoció de una forma muy personal a Jesús y movido por el Espíritu Santo dio testimonio delante de todos del cambio de transformación en su vida.
Dios nunca forzará tu voluntad para que conozcas a Jesús y lo que la Biblia enseña acerca de El, pero cuando tu obedezcas la petición de Dios, y tus decisiones sean conforme a su petición, entonces el Espíritu Santo, usando la Palabra de Dios, la Biblia, te irá mostrando quién es Jesús, y lo que hizo por ti, y tu vida tendrá ese cambio que necesitas

7. La confirmación de Jesús
Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.
Jesús ha venido hoy y se ha presentado delante de ti, porque El te ha visto perdido, te ha buscado porque quiere salvarte y darte Vida Eterna. El no se va a marchar a ninguna parte, El quiere tener una relación personal contigo, que le conozcas y que puedas aceptar ese perdón, pero recuerda, El no puede formar tu voluntad.

APOCALIPSIS 3:20
He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta,
entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.


«Zaqueo, el buscador que era buscado”

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