¿Sabes que el trabajo también forma parte de la Naturaleza de Dios?

Quizá nunca lo has pensado, pero el trabajo forma parte de la naturaleza de Dios.

Dios trabajó creando los cielos y la tierra, trabajó preparando el huerto para Adán y Eva, y le dio una actividad de trabajo también a Adán y a Eva antes de que desobedecieran.

Con la desobediencia el trabajo se convirtió en algo más pesado, y eso lo experimentamos todos los días en nuestras vidas.

Aunque ahora tu digas “yo no trabajo”, pero si lo miras fijamente tu pensamiento es: “cuánto trabajo me lleva encontrar un trabajo”, es una frase rara, pero ya estás trabajando en algo pesado.

Lo importante es la motivación que te hace levantarte cada día e ir al trabajo, o ir a buscar ese trabajo que no tienes.

¿Cuál es tu motivación?, y ¿Esa motivación tiene en cuenta a Dios?

La mejor motivación es: Conectar cada día tu trabajo con Dios

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